ORGANIZACIÓN PARA EL FOMENTO DE LOS ESTUDIOS INTERNACIONALES

La guerra silenciosa.

Autor: Pablo G. Pachá. Relaciones Internacionales y Economía.

RESUMEN:

Durante 2 años se ha llevado a cabo masacres y calamidades contra la población civil en Tigray (Etiopía), mientras la Unión Africana no intervenía ni se mencionaba y China, Turquía y EAU abastecían al gobierno federal etíope con armamento y drones que perpetuaron múltiples ataques contra la población civil. La Guerra del Tigray ha sido una guerra terriblemente silenciosa, como así se ha buscado desde el gobierno y su campaña mediática, ocultando e invisibilizando crímenes contra la humanidad, de los cuáles todavía hoy no sabemos su pleno alcance. La inestabilidad en la zona del cuerno de África también amenaza la lucha contra el terrorismo y piratería somalí, en la cual Etiopía anteriormente colaboraba pero que cada día se presenta más como un obstáculo que como un aliado.

ABSTRACT:

For 2 years there has been massacres and calamities against the people of Tigray (Ethiopia), while the African Union did not intervene nor spoke for itself and China, Türkiye and UAE provided the Ethiopian federal government with equipment and drones, which perpetuated multiple attacks on civilians. The Tigrayan War has been one terrible and silent, as it has been sought from the government and its media campaign, hiding and blocking crimes against humanity,  of which even today we do not know its full scope. Instability in Africa´s horn region also threatens the fight against terrorism and piracy in Somalia, where Ethiopia used to be an ally but every day it seems to be more of an obstacle.

Atardecer en Tigray, Etiopía. Fuente: pixels.com

Etiopía, la cual rara vez en su historia contemporánea ha conocido la paz duradera, se encuentra sumida en un conflicto interno de atrocidades inimaginables y desconocidas por todos, y es que, si bien la Guerra del Tigray parece haber llegado a su fin, la senda de crímenes internacionales y la rotura interna parecen ser irreconciliables y amenazan con la estabilidad del Estado etíope, el cual otrora era símbolo de prosperidad.

Etiopía, la considerada como la cuna de la raza humana, ha patrocinado una guerra civil (la Guerra de Tigray) que se ha ganado el renombre de la guerra más atroz y mortal del siglo, con estimaciones de 600.000 civiles muertos en tan solo 2 años, según instituciones europeas. El conflicto comenzaría en noviembre de 2020, cuando el premio Nobel de la Paz y presidente del Estado Federal Etíope, Abiy Ahmed, llevara a cabo una operación militar contra el Frente de Liberación del Pueblo de Tigray (de ahora en adelante TPLF) en la región de Tigray Occidental, debido a un presunto ataque contra una base militar etíope. Pero, ¿por qué se produjo este ataque? ¿Quiénes son los actores?

Para poder entender el conflicto etíope tenemos que indagar un poco en su historia. Etiopía, como muchos otros países en África, es una amalgama de etnias y pueblos, alrededor de unos 80, de entre las cuales nos interesan particularmente para este conflicto las regiones/etnias de Tigray, Omoro, Afar y Amhara. Durante décadas, el gobierno federal etíope ha estado liderado por el pueblo Tigray, de los más prósperos y poblados de Etiopía. Este pueblo se caracteriza por tener una enemistad o inquina con la región de Eritrea, antaño parte de Etiopía, y con los que ha liderado durante décadas conflictos interminables. Con la llegada al poder de Abiy Ahmed en 2019, proveniente de la región de Amhara, se puso fin al largo conflicto con Eritrea, lo que le otorgó el premio Nobel de la Paz, y un futuro aliado en la guerra del Tigray. Sin embargo, si la rivalidad del pueblo tigrayano con Eritrea era notable, no es mucho más distinta con la región de Amhara, la cual también tiene disputas con Tigray por reclamaciones territoriales en Tigray Occidental.

Todos estos antecedentes, sumados al cúmulo de tensiones por las elecciones de 2019 y la apatía que se tienen los pueblos etíopes entre ellos (nos referimos a los involucrados directamente en el conflicto) derivó en una guerra cruel donde los peores amparados han sido los civiles.

Tras dos años de completo abandono y desentendimiento de la comunidad internacional, refiriéndonos a esta sobre todo como el bloque occidental y la Unión Africana, se han acusado a todas las partes del conflicto de crímenes de guerra y de lesa humanidad. De hecho, el Secretario de Estado Antony Blinken acusó al Gobierno Etíope de limpieza étnica por las acciones cometidas contra los tigrayanos/as. Algunas de las atrocidades cometidas por el premio Nobel de la Paz han sido el corte de suministros y alimentos, asesinatos indiscriminados, encarcelamiento ilegal y tortura, desplazamiento forzado, violencia sexual, posible exterminio étnico y otros actos inhumanos. Según Agnès Callamard and Kenneth Roth “el trato de los detenidos de Tigrayan puede equivaler a exterminio, un crimen contra la humanidad que se define en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional como la imposición intencional de condiciones de vida, entre otras cosas la privación del acceso a alimentos y medicinas, calculada para traer sobre la destrucción de parte de una población”.

Las consecuencias a largo plazo según el geógrafo político Richard Hartshorne, de entre las cuáles se encuentra la diáspora del Tigray, se guiarán en función de si sus fuerzas centrípetas (unificadoras) superan a las centrífugas (divisoras). La viabilidad de cualquier Estado depende de que las primeras superen a las segundas. Las fuerzas centrípetas corresponderían a la construcción de infraestructuras, servicios y la promoción de una cultura nacional compartida, entre otras cosas; frente a las fuerzas centrífugas que cada día son más fuertes en Etiopía, viéndose gravemente intensificadas por los conflictos interétnicos y las difamaciones mutuas, avivándose más aún por el despliegue de propaganda por parte de todos los bandos y por las plataformas de redes sociales como Facebook y Twitter que han facilitado la difusión del discurso de odio y ayudado a alimentar las atrocidades.

Siguiendo este hilo, otro aspecto a destacar de la Guerra del Tigray, han sido el uso de las redes sociales y la redes de comunicación en el conflicto, las cuáles han tenido en parte mucho que ver con el silencio que se sumía sobre esta guerra. El gobierno federal etíope ha tratado de censurar cualquier cobertura independiente o crítica del conflicto, a través de una combinación de bloqueos de Internet, intimidación de los trabajadores humanitarios y los medios, y restricciones a los periodistas extranjeros, logró en gran medida efectuar un apagón de noticias. Con Internet y los servicios de energía cortados dentro de Tigray, los líderes de Tigray fueron menos capaces de dar forma a las narrativas populares de la guerra. El entorno digital tóxico ha inundado de información errónea, propaganda, discurso de odio, retórica genocida e incitaciones a la violencia el curso de la guerra.

La combinación de la censura del gobierno y la fragmentación del TPLF ha significado que las noticias de graves abusos contra los derechos humanos y crímenes de guerra se filtraran inicialmente con lentitud. Incluso ahora, la comprensión del mundo de lo que ha sucedido en Tigray es irregular.

Finalmente, a finales de 2022 se alcanzó un acuerdo de paz en Pretoria por la repentina intervención de la UA, para el cese de las hostilidades, donde se preveía además el restablecimiento de la autoridad federal etíope en Tigray y la disolución de la administración del TPLF. El acuerdo es inconcluso, presenta una falta de claridad sobre la rendición de cuentas y, lo que es más grave, el silencio sobre la participación de Eritrea en el conflicto. Según Jeffrey Feltman, se debería implementar una forma de fomentar la unidad dentro del Cuerno de África, a través por ejemplo del fortalecimiento de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo, una agrupación regional de estados de África Oriental que Eritrea ha ignorado o tratado de socavar durante mucho tiempo. Solo el tiempo y la ayuda internacional, mezclado con una pizca de hermandad, permitirá a los etíopes reinstaurar el orden.

1 Marzo 2023

ISSN 2340 – 2482

BIBLIOGRAFÍA

Amnistía Internacional. (2021, 17 agosto). Etiopía: La masacre de cientos de civiles en Axum por soldados eritreos podría ser un crimen de lesa humanidad. https://www.amnesty.org/es/latest/news/2021/02/ethiopia-eritrean-troops-massacre-of-hundreds-of-axum-civilians-may-amount-to-crime-against-humanity/

Amnistía Internacional. (2022, 2 noviembre). Etiopía: Crímenes de lesa humanidad en Tigré Occidental. https://www.amnesty.org/es/latest/news/2022/04/ethiopia-crimes-against-humanity-in-western-tigray-zone/

Coons, C. (2023, 23 enero). Peace Is Still Possible in Ethiopia: How to Avoid a Balkan-Style Catastrophe in the Horn of Africa. Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/articles/ethiopia/2021-12-06/peace-still-possible-ethiopia

Etiopía: Crímenes de lesa humanidad en Tigray Occidental. (2022, 7 mayo). Human Rights Watch. https://www.hrw.org/es/news/2022/04/06/etiopia-crimenes-de-lesa-humanidad-en-tigray-occidental

Feltman, J. (2022, 26 diciembre). Ethiopia’s Hard Road to Peace: The Country’s Problems Go Far Beyond Tigray. Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/ethiopia/ethiopias-hard-road-peace

Gavin, M. (2023, 28 enero). Ethiopia After the War: How America’s Approach to the Country Should Change. Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/africa/ethiopia-after-war

Lin-Greenberg, E. (2022, 20 diciembre). The Dawn of Drone Diplomacy: Unmanned Vehicles Are Upending the Arms Trade—and the Balance of Power. Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/ukraine/dawn-drone-diplomacy

Lyons, T. (2023, 23 enero). How to Pull Ethiopia Back From the Brink: Washington Must Help End the War. Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/articles/africa/2021-11-24/how-pull-ethiopia-back-brink

Roth, A. C. A. K. (2023, 30 enero). Ethiopia’s Invisible Ethnic Cleansing: The World Can’t Afford to Ignore Tigray. Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/articles/ethiopia/2022-06-02/ethiopias-invisible-ethnic-cleansing

Woldemariam, N. C. A. Y. (2023a, enero 30). Ethiopia’s Perilous Propaganda War: Efforts to Control Information Are Only Hardening the Country’s Divisions. Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/articles/africa/2021-04-08/ethiopias-perilous-propaganda-war

Woldemariam, N. C. A. Y. (2023b, febrero 17). Can Ethiopia Survive? What Might Happen If Abiy Ahmed Falls. Foreign Affairs. https://www.foreignaffairs.com/ethiopia/can-ethiopia-survive

La Guerra Silenciosa de Pablo G.Pachá est mis à disposition selon les termes de la licence Creative Commons Attribution – Pas d’Utilisation Commerciale – Partage dans les Mêmes Conditions 4.0 International.

COMPARTE ESTE POST